Ir al contenido principal

LA ESTACA

Herramienta de Apoyo o Muleta.


Estos imponentes pinos que estan frente a una casa en Edmonton, Canada 
me han hecho recordar esta reflexión aunque están cubiertos ahora por la nieve.
 Increible pensar que una vez eran solo una semilla y que el paso del tiempo sólo
los ha hecho fuertes e imponentes igual que a cada uno de nosotros las adversidades
Muchas veces cuando plantamos un arbusto o un árbol, colocamos un soporte de madera al cual amarramos el tronco para dar apoyo, mientras las raíces se asientan y éste queda erguido por si solo, a esto le llaman estaca. Ese fue el caso de los tres pinos que plantamos en el frente de nuestra casa en Santo Domingo, República Dominicana hace unos años.






Luego de casi un mes, ya estaban con sólidos cimientos y fui retirando la estaca de cada uno. Al llegar al último noté que se abalanzaba hacia un lado, su peso era mayor que su fuerza y sus raíces no estaban listas todavía, así que volví nuevamente a amarrarlo, esta vez colocando la estaca del otro lado.

Pasado nuevamente un mes, volví a soltar las amarras pero seguía encorvado, la estaca lejos de ser un soporte, se había convertido en una muleta. Me quede mirando el pino fijamente, era del mismo tamaño que los otros dos, su mismo color, forma y plantado en el mismo suelo. Sentí en mi rostro la brisa fresca de la mañana y como un rayo estrenado de sol, llego a mi esta reflexión. Pude comparar que la situación del pino, coincidía con una de las “herramientas” que algunas veces tomamos de apoyo y que luego se convierten en muletas, impidiendo así nuestro desarrollo y condenándonos a la incapacidad, este era el caso de las películas pornográficas.

Tal vez por un instante podemos pensar que se trata de algo inofensivo, que aporta algo de chispa a nuestra relación de pareja, que nos daría más emoción y nuevas ideas. Lamentablemente muchas parejas nos dejamos confundir y llegamos a considerarlas como una ayuda, ignorando que son una puerta que abrimos a una dependencia como cualquier otra y que lejos de proporcionarnos consejo o ayuda, nos atan de forma tal, que ya no podemos excitarnos, ni motivarnos si no estamos viéndolas.

Es posible que nos creamos justificados ante el hecho de que estamos viéndolas con nuestra pareja, pero aun así, es mayor el daño que nos ocasionan, que el beneficio que podemos suponer. Caemos frecuentemente en la comparación, la falsa expectativa, el deseo de innovar, sin siquiera pensar si al final será algo de nuestro agrado, de el de nuestra pareja o peor aun del agrado de Dios.

Aquí en su nuevo hogar.
En esos momentos de querer salirnos de la rutina, pidámosle a El que nos regale la pasión, la entrega, el deseo, la ternura, la frecuencia y todo lo demás que queramos, porque El nos creó y nos conoce y es quien ha creado y escogido esa pareja para nosotros, El es el dueño del amor.


Les cuento que el pinito al final ya no tenía su estaca, le puse un poco más de tierra en el tronco (para nosotros la palabra de Dios es la tierra abonada), abono para fortalecer sus raíces (la gracia del Espíritu Santo que nos fue dada en nuestro bautismo y que se renueva cada vez) y por supuesto necesite podar algunas ramas. Perdió un poco de altura (en nosotros es dejar atrás el orgullo y la falta de comunicación) y finalmente crece fuerte y sano, con su tronco mirando al cielo y sin muleta alguna. 

Antes de mudarnos de esa casa, llevamos los tres pinitos a su nuevo hogar en jarabacoa y alli crecen felices.







Gracias Señor porque cada día renuevas en nosotros el amor y la pasión para sólo depender de ti y así poder disfrutar de nuestro mejor vino.

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

LA SABILA Y EL HELECHO

Nuestras diferencias vistas como un complemento Un día al regar las plantas, volví a ver con sorpresa mi planta de sábila o aloe y como en ella un brote de esporas de helecho que hace un tiempo había germinado, no sólo seguía con vida, sino que estaba grande, frondoso y aún mayor que otros a los que yo había transplantado cuidadosamente a un lugar donde "se suponía" tendrían todas las condiciones para desarrollarse.  Este hecho me hizo reflexionar sobre cómo, una planta árida tipo cactus, como la sábila, cohabita en la misma maceta que un helecho. Si bien es cierto que la sábila tenía ya años ahí, con pleno sol, poca agua y bastante grande ya, aún así me sobrecogió la pregunta de cómo había sido el proceso de adaptación del helecho a este medio ambiente. El helecho llegó allí por el soplar del viento que desprendió sus esporas ya maduras y el tiempo le hizo echar raíces que le hicieron permanecer. Este hecho me ayuda a ver como a veces vemos parejas tan difer...

LA RAIZ DEL PROBLEMA

Buscando Soluciones Definitivas. Cuantas veces nos ha pasado que creemos que ya hemos superado una situación y nuevamente nos vemos lidiando con la misma como si fuera la primera vez.  Claro está con el ingrediente adicional de la impotencia,   la frustración   y una vocecita interior(conciencia) o exterior(amigos y familiares) diciéndonos que siempre es lo mismo. Pues en una ocasión tenían un ligero dolor de muelas, pensé que tenia la encía un poco inflamada y que era cuestión de hacer unos enjuagues. Al segundo día con la molestia, comencé a cepillarme con una pasta dental especial para sensibilidad en los dientes que había utilizado anteriormente. Aun teniendo ese presentimiento de que era algo más, no presté mucha atención y me limité a èstas soluciones. Al tercer día empecé a tomar unos calmantes para el dolor. Esa misma tarde me llamaron del ortodontista para confirmar mi cita, tenían que ajustarme los aparatos retenedores   y pensé -deb...

EL HILO DE LA BOBINA

Saber Cuando Parar es de Sabios. Luego de tener en desuso por años mi maquina de coser, empecé a tomar un curso de costura. Dentro de las cosas más importantes está el ensartar correctamente la máquina con dos hilos; uno en la parte superior que pasa por varios lugares y termina en la aguja y otro que sale de la parte interior de la misma, desde una capsula con un carretel que se rellena, a lo que llamamos bobina. Con estos dos hilos entonces se produce la costura. Fácilmente mientras cosemos podemos ver las puntadas que van quedando en la parte superior de la tela, pero para ver las de la parte inferior debemos parar y voltearla, verificando así que la costura está en la forma correcta. Esto es lo que me ha hecho reflexionar esta vez. Mientras cosía una falda de paneles blanca, verifique un par de veces   y la puntada era perfecta, por lo que simplemente cosí y cosí sin parar, largas costuras. Cuando paré con la suposición de que ya había terminado, me di cuenta que...